Por Un Señor de Toledo.- Cada vez tenemos más cerca el comienzo de una de las llamadas las tres grandes, las carreras de tres semanas que marcan de manera muy importante el calendario ciclista de cada temporada y la preparación de los corredores para disputar una, dos, y en pocos casos las tres pruebas. –Giro de Italia, Tour de Francia y Vuelta a España-
La primera de ellas en disputarse en el Giro de Italia y lo hará del 4 al 26 de mayo, con 3.405,3 kilómetros de recorrido a lo largo de 21 etapas. Un Giro de Italia 2013, que como ya dijimos hace unos meses, tras su presentación, “podríamos definirlo como muy completo, duro y equilibrado, con terreno favorable para escaladores, pero también con buenas bazas para los contrarrelojistas; un Giro que quiere ser el Tour. Parece que la carrera italiana ha preparado un recorrido atractivo para los grandes nombres del ciclismo actual, y así robarle una parte de ese tan ansiado protagonismo al Tour de Francia, como ya explicamos en su día”.

Ahora vamos a empezar con la publicación de una serie de post en los que os desgranaremos las etapas que para El Tío del Mazo, sobre el papel, resultarán las más importantes y decisivas en la clasificación final de la carrera.
Comenzamos con la etapa número ocho, que se disputará el próximo 11 de mayo. Se trata de una contrarreloj larga y llana, muy al estilo Tour de Francia. Son 54,8 kilómetros, entre Gabicce Mare y Saltara sin apenas subidas de importancia, salvo en el último kilómetro que es un repecho con un porcentaje de hasta el 13% de desnivel. Los dos kilómetros anteriores también serán en subida, pero con porcentajes muy bajos, favorables también para rodadores con potencia. Desde luego no será definitivo, ya que una vez que los corredores lleguen a ese punto, ya habrá diferencias sustanciales tras 54 kilómetros de contrarreloj pura en terreno llano, y el que haya perdido ya una minutada, no podrá limar el tiempo perdido.

Sin duda este será el primer punto de inflexión de la carrera. Es el día en el que los grandes contrarrelojistas tienen que intentar conseguir un buen botín de tiempo para encarar las siguientes etapas, que será cuando la carretera empiece a empinarse de verdad. Sobre los grandes favoritos para esa etapa y para hacerse con la Maglia Rosa hay un nombre por encima de todos, el del británico Wiggins, el último ganador del Tour de Francia y que esta temporada intentará embolsarse su primer Giro.